31-12-2023 Lily Forado
Hoy como día especial 123123, qué mejor que hacer repaso de un año lleno de aventuras.
2023 ha sido un año lleno de grandes triunfos y alegrías para los jinetes españoles y estar allí viéndolo en directo, narrarlo y capturarlo a través de la fotografía no tiene precio. A veces con la vorágine del día a día, yo no soy consciente de que cada día veo caballos, disfruto observando las pruebas, analizo la evolución de cada uno de los binomios y sobre todo ese sentimiento que no se puede describir de WOW cuando ves a tu jinete/amazona favorita en pista; y por ello me siento afortunada.
Podría estar horas escribiendo sobre 2023, pero para mí esta temporada ha sido muy intensa en todos los sentidos de la palabra. Muchos son los retos que presenta la sociedad de la información y el periodismo; es estar en situ, y posteriormente conjugar rapidez con profundidad en cada una de las entradas publicadas. Además, añadiendo un ritmo por encima del más allá a la hora de procesar, trabajar y publicar el contenido multimedia ya sea fotográfico como multimedia (reels). Y abiertamente podemos decir que toda aquella persona que se dedica al sector de la información es «Superwoman o Supermen».
De todos los concursos que he asistido este 2023, me quedo sin lugar a duda con Riensenbeck y Ermelo. El campeonato de Europa no fue apto para cardíacos, y la plaza olímpica para España pendía de un hilo. Afortunadamente, España ya cuenta con su ticket para Paris 2024. Y Ermelo pues es una gran alegría, ya que frente a los detractores, de nuevo el P.R.E y CDE han demostrado estar en la pelea y con gran honor defendiendo los colores de la bandera española.
2024 se presenta con gran gran emoción. De nuevo empieza todo de cero, pero en esta ocasión con el aliciente de pelea olímpica. Un año muy importante donde de nuevo todo puede pasar. Para mí, lo que más me gusta y donde disfruto más es como se monta el puzzle del equipo, es decir previo a la selección, las estrategias de calendario de competición, los resultados. Todo ello genera una gran emoción que es difícil de expresar. Los seis meses siguientes se presentan intensos, habrá mucha tensión, de la buena, de la deportiva con el fin de pelear por esas ansiadas plazas.
Para quién no me conoce, para mí Versailles es un lugar idílico. La primera vez que lo visité fue cuando yo tenia 13 añitos y estaba estudiando la revolución francesa en mi colegio. Me quedé sin palabras al ver toda esa grandeza de Luis XIV. La ecuación de cultura francesa+ Versailles + Juegos Olímpicos es puro Éxtasis. Soy consciente de que mis niveles de las cuatro hormonas de felicidad endorfina, serotonina, dopamina y oxitocina estarán por las nubes durante los meses de Junio/Julio y Agosto.
En unos días con días comienza ya la temporada americana de Wellington. Recuerdo la primera de ellas en 2016. Desde entonces; miles de concursos y trancos después, este 2024 será mi octava temporada. Siempre estoy con la mente abierta de cambios, nuevas ideas y nunca dejo de pensar como mejorar o aportar nuevos conceptos.
A por el 2024 !!!! 🙂
